① Intercambio de roles. Leí por ahí que las mujeres deberían tomar la iniciativa en el Día de San Valentín. Quería contarles que en Japón son, de hecho, las mujeres quienes el 14 de febrero hacen regalos a los hombres. Éstos (en deuda) deben luego devolver el gesto el 14 de marzo, durante el así llamado Howaitode ホワイトデー (Día Blanco). De más está decir que esta distinta codificación deja de lado a las parejas homosexuales. Pero vayamos por sus implicaciones. ¿Intercambiar los roles de quienes regalan hace del fenómeno algo más igualitario? ¿Japón deja así de ser uno de los países más machistas y con mayor silencio en cuanto al acoso? Y más importante aún: ¿en qué otros casos creemos estar transformando las estructuras sociales, cuando en realidad no se trata más que de una reproducción de normas y de códigos preestablecidos?
② Activismo anti-valentino. Para nosotros (los ForeverAlone) el día de San Valentín puede generar rechazo, envidia, un corazón acribillado que sabe que va a recibir un golpe igual de duro y de demoledor en exactamente un año. O algo así. En Japón, se tomaron bastante en serio estas consecuencias adversas. De hecho, algunas empresas prohibieron los regalos de esta festividad dado el estrés o el mal momento que podría causarle a los empleados sin pareja. Pero existe un grupo que llevó esto a un plano, eh, político. Se trata de los Kakumeiteki Himote Doumei 革命的非モテ同盟 (que se traduciría algo así como «Alianza Revolucionaria de Perdedores Sin Pareja»). He aquí su Twitter. Hace unos días se reunieron en el barrio más céntrico de Tokio para proclamar slogans del estilo: «¡Resistamos al capitalismo romántico!», «¡No discriminemos a las personas por el número de veces que tienen sexo!» y, quizás el más polémico, «¡Besarse en público es un acto terrorista!».
«バレンタインデー粉砕» («Pulvericen al día de San Valentín»)
BONUS TRACK: Con un perfil más serio, les dejo una nota buenísima del Japan Subculture Research Center, sobre todas las particularidades de San Valentín en Japón, desde tiempos muy antiguos hasta hoy. Aquí.
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